Patricia Bullrich justificó el uso de balas de goma en el operativo en el Congreso y acusó: “Quieren que pasemos el límite”
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, justificó este viernes el operativo que montó ayer en el exterior del Congreso mientras dentro del Palacio Legislativo los diputados debatían la ley ómnibus. Las tareas derivaron en disturbios y violencia cuando las fuerzas federales avanzaron sobre los manifestantes e hirieron a varias personas con balas de goma, entre ellas a periodistas. “Quieren que pasemos el límite”, aseveró la funcionaria, que negó que sea “desmesurado” el tipo de acciones que realizan sus tropas en las protestas.
“Todo el tiempo nos prueban, quieren que nos pasemos de límite, pero habrán visto que todo fue ordenado. Sí había bastantes fuerzas porque lo que termina pasando si no es que viene el desorden total, y no hay posibilidad de alcanzar el objetivo y de proteger a los miembros de las fuerzas”, indicó en Radio Mitre la dirigente de Pro volcada a los libertarios.
Luego de que anoche los agentes motorizados de la Policía Federal Argentina (PFA) se movieran de a dos y mientras uno intentaba abrir las calles primero el otro arrojaba balas de goma, Bullrich explicó que se tomó esta decisión porque ella vio la escena de cerca y “volaban” botellas y palos, y que también había “situaciones de permanente agresión” para hacer retroceder a las tropas que están bajo su mando. “Esto hace que las fuerzas de seguridad tengan que hacer un movimiento de dispersión para que la gente que quiere volver a tomar la calle de manera violenta vuelva para atrás, eso fue lo que se logró”, alegó la ministra, que expresó que el gas pimienta está autorizado y que no quema la piel.
En medio de eso quedaron periodistas, camarógrafos y fotógrafos que hacían su trabajo cuando fueron alcanzados por proyectiles de goma, entonces Bullrich recordó que en “muchos países” los reporteros trabajan fuera de los lugares donde se mueven las fuerzas de seguridad y los manifestantes. “Nunca se avanzó en ese sentido, en poner a los periodistas fuera de la escena, porque quizá lo analizan como una falta a la libertad de prensa, pero es lo recomendable. En muchos momentos la Policía les dijo ‘córranse, tengan cuidado, vamos a actuar frente a esta situación de desorden’”, indicó.
Convencida de que con su gestión “la ley empezó a tener un valor” y de que su misión es lograr el orden en las calles, la ministra aseguró -pese a las críticas que recibe del kirchnerismo y de la izquierda- que con estos métodos logra que las fuerzas de seguridad tengan el control. “Si no lo tienen y hay fuerzas corriendo en el medio de los manifestantes terminamos en un desastre”, enfatizó e incluso cuestionó la forma en que las administraciones de Unión por la Patria (UP) manejaron este tipo de marchas.
“A mí me toca una parte, que una sesión en Diputados no sea un momento en el que hay un sector organizado políticamente que intente tomar el Congreso, rompa los vidrios, destruya todo, genere caos, como ya lo hemos visto en muchas oportunidades, desde las famosas 14 toneladas de piedra a otros momentos. Inclusive ayer Máximo Kirchner dijo que le habían tirado vidrios al despacho de su madre. Con nosotros no hubiera sucedido, no hubieran podido; si ellos que eran gobierno hubieran hecho las cosas bien, protegiendo las instituciones de la República y a quienes están adentro sesionando”, marcó, en relación con el discurso del líder camporista, que en el recinto se quejó por el operativo en el exterior del Palacio Legislativo y recordó aquel momento en que la oficina de Cristina Kirchner fue apedreada, en 2022, durante la gestión de Alberto Fernández, en una protesta en rechazo al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En tanto, Bullrich aseguró que este gobierno pondrá orden para que el Congreso sesione y las calles no estén tomadas. “Entre un manifestante y un policía está la ley y nosotros la vamos a hacer cumplir”, dijo la funcionaria, que también defendió la detención de cuatro mujeres -ya liberadas- el miércoles por la noche, cuando se sentaron en la calle a cantar el Himno en las inmediaciones de la Cámara baja. “¿Las mujeres tenemos condición de igualdad hasta que somos victimas en una situación? Si somos iguales, somos iguales. Decir que son mujeres o varones es lo mismo”, indicó la ladera del presidente Javier Milei, quien aseguró que estas cuatro chicas “impedían el tránsito”, y destacó: “Usan el término ‘mujeres’ como si fuera un símbolo de debilidad”.
Incluso acusó al diputado nacional de UP Eduardo Toniolli, también referente del Movimiento Evita, que estuvo en el momento en que la PFA apresó a este grupo, de “meterle una trompada” a un agente, volarle los anteojos y dejarlo con un diente roto. “La Justicia catalogó ese episodio como lesiones graves. No se lo detuvo porque gritaba ‘soy diputado, soy diputado’, y las fuerzas en ese momento pensaron que podían tener un problema mayor”, aseguró, a la vez que destacó el apoyo del Poder Judicial.
“Cuando uno toma una decisión, la tiene que llevar a fondo. El país no va a cambiar si lo hacemos a medias. Veo a muchos que en campaña dicen que van a ser firmes, pero después a la hora de hacerlo se asustan. Hay 2000, 3000 personas, que quieren ser violentas, impedir el tratamiento de la ley. Bueno, hay que ir para adelante. Yo no estoy dispuesta a quedar a mitad de camino”, sentenció.
La ministra de Seguridad se mostró convencida de su rumbo y dijo que no es “desmesurado” el tipo de tareas que realizan las fuerzas federales; ayer hubo varias personas heridas, entre ellos periodistasLA NACION